John Barleycorn. El elogio a la cebada del folk británico
Se acerca Mi Chambergo Domus Fest y aprovechando que el patrocinador del evento es la compañía de cerveza toledana Domus, me gustaría rescatar una de las canciones más emblemáticas de la historia del folk británico, John Barleycorn, dedicada a la cebada.
John Barleycorn was a hero bold,
Of noble enterprise;
For if you do but taste his blood,
‘Twill make your courage rise.
Robert Burns, John Barleycorn, 1782
Aunque no se sabe a ciencia cierta cuál es el origen del mito, éste se encuadra en la tradición oral, en la importancia que la cebada tenía en la sociedad británica como símbolo pagano y las bebidas que se obtenían de ella, sobre todo la cerveza y el whisky. En la leyenda, John Barleycorn es la personificación del proceso por el que pasa la cebada desde que se cosecha en otoño, pasando por la siega y su transformación en malta hasta que llega al gaznate de los buenos trabajadores del campo. Durante este proceso John Barleycorn sufre todo tipo de humillaciones, amputaciones y torturas, pero a pesar del sufrimiento nunca pierde la dignidad.
Hay registros del poema desde el siglo XVI pero es gracias al poeta escocés Robert Burns, que empieza a ganar prominencia. Burns le retrata como una figura casi mesiánica, en el que Barleycorn muere para que otros puedan vivir. A raíz de este poema la cebada se convierte en una especie de dios pagano, con sus propios ritos y cultos, que se ha extendido a través de los siglos en la sociedad rural británica. Se pueden ver parte de estas ceremonias en la película de culto El hombre de mimbre de 1973, en la que se representan disfraces y danzas en honor a John Barleycorn.
Escenas de El Hombre de Mimbre en las que se muestran ritos en honor a John Barleycorn
Cuando en los años sesenta comienza a ponerse de moda todo lo relacionado con el folk británico, varios grupos empiezan a grabar diferentes adaptaciones del poema. Aunque artistas de la talla de Jethro Tull, Fairport Convention, Pentangle o más recientemente Paul Weller han grabado versiones de John Barleycorn, ninguna ha alcanzado la excelencia de la grabada por Traffic en 1968 y titulada John Barleycorn (must die), en la que las voces de Steve Winwood y Jim Capaldi se mezclan en un dueto memorable. Y mientras escucho las andanzas de Mr. Barleycorn, no puedo parar de pensar en el próximo sábado, en el Círculo de Arte de Toledo, cuando esté disfrutando de una Domus helada y de conciertos de primer nivel en Mi Chambergo Domus Fest.
Traffic, John Barleycorn (must die). Atención a la aparición de Capaldi, como si del propio Barleycorn se tratara, a partir del minuto 3.18; unos días después de este concierto moriría de cáncer de estómago.
POR ZAMARRA