Pablo Und Destruktion presenta Sangrín en las Entrevistas Chambergas

Día 15 de Mayo de 2014. Tercer aniversario del 15M y una cita marcada en rojo en el calendario desde hace meses: el primero de los tres conciertos de Nacho Vegas en la Joy Eslava de Madrid, presentando su nuevo disco Resituación. Debido a la larga discografía de Nachín (y a que las celebraciones de San Isidro en Madrid nos habían tenido bastante ocupados…), no habíamos tenido tiempo de preparar la tarea en lo que al telonero del evento se refería. Así pues, mis acompañantes y yo, nos enfrentábamos «vírgenes» a la música de Pablo Und Destruktion.

Y lo que nos encontramos fue una escena propiamente lynchiana: la iluminación, el look de Pablo García y la música podrían haber encajado perfectamente en secuencias de películas como Carretera Perdida o Mulholland Drive. En contraste, las letras de Sangrín (Discos Humeantes, 2014) no son para nada oníricas si no que, siguiendo la línea «política con estilo» de León Benavente o del propio Nacho Vegas, van directas a la yugular, con un punto (o dos, o tres…) de rabia en la interpretación por encima de las dos referencias citadas.

Tras la experiencia de este concierto en la Joy Eslava, que a nadie dejó indiferente, nos moríamos de ganas por conocer algo más a Pablo Und Destruktion: os dejamos con sus respuestas a la entrevista chamberga.

¿Qué canción, que no sea de tu propia cosecha, interpretas más en los ensayos?
Bueno, tenemos alguna versión como “Por cada rayo que cae” que es de Radiador, un grupo que la interpretó una sola vez y nunca la grabó. También hemos adaptado “A Galopar” de Paco Ibañez o “Pozu Maria Luisa”.

Elige un momento clave de la historia de la música.
En la marcha negra del 2012, cuando los mineros entraron en Madrid cantando «Pozu Maria Luisa» y la gente se les unía espontáneamente.

¿Qué grupos escuchaste durante la grabación de SANGRÍN? ¿Han influido en el resultado final?
Durante la grabación estuve absorbido, así que poco escuché, pero antes pasé un año en el que escuché mucha psicodelia de Jacco Gardner o Connan Mockasin y también del tipo de Spacemen 3. También escuché cantautores como Paco Ibañez, Nick Cave y, sobre todo, le di a los Einstürzende Neubauten.

Explícanos, si es posible, el título del álbum.
“Sangrín” es una palabra asturiana, en concreto de la zona de Aller, que se usa para referirse a las personas que tienen la sangre caliente y que a la mínima saltan. Mi madre y mi abuelo, que en gloria estén, siempre me lo decían y pensé que cuando compuse el disco estaba en la etapa más “sangrina” de mi vida.

¿Qué tres canciones le recomendarías escuchar al alcalde/alcaldesa de tu ciudad?
«El acero del Partido I», de Esplendor Geométrico.
Una de Fee Reega, «Varsovia», porque parece que es fan. Increíble pero cierto.
«Cómo hacer crack», de Nacho Vegas.

¿Cuál es tu mejor recuerdo y cuál el peor de un concierto de PABLO UND DESTRUKTION?
El mejor recuerdo acaba de ser adjudicado para las tres citas que he tenido teloneando a Nacho Vegas en Madrid. El peor creo que se lo lleva el Monkey Week en el que participé hace un par de años, todo fue un desastre. Aún así de lo malo se aprende mucho, sin riesgo no hay gloria.

Define tu sonido en menos de 10 palabras.
Mala ostia, fuzz, chapaparta, tronada, amor de madre, asturpsicodelia y krautchopo.

¿Cuál será el siguiente paso de PABLO UND DESTRUKTION?
Grabar un EP compartido con Medievo y que saldrá en Septiembre. Por el medio, actuar a más no poder.

¿Qué banda de tu ciudad nos recomendarías escuchar?
Ya la conoceréis, pero por si acaso os recomiendo que escuchéis a Elle Belga.

Pínchanos un chambergazo.
Forever Dolphin’s love, de Connan Mockasin.

POR PARCA