Matuja presenta su primer EP homónimo en la Entrevista Chamberga

¿Qué canción, que no sea de vuestra propia cosecha, interpretáis más en los ensayos?
Probablemente alguna de Led Zeppelin o Black Sabbath, como «Dazed and Confused» o «Snowblind». Al no tener ninguna canción algo más relajada, o como suele decirse en los directos «para arrimarse», una de las que más hemos tocado es la versión de «Babe I’m gonna leave you» de Zeppelin.

Elegid un momento clave de la historia de la música.
Igual es una respuesta muy esperada, pero como grupo de rock con gran influencia de bandas de finales de los sesenta y principios de los setenta que somos, no ha habido nada en la historia que supusiera un punto de inflexión en la música en directo como lo fue Woodstock. Un evento de tal repercusión es bastante inviable en nuestros días.

¿Qué grupos escuchasteis durante la grabación de MATUJA? ¿Han influido en el resultado final?
Pues, por aquella época (principios de marzo) estabamos obsesionadísimos con Graveyard, Scorpion Child, DeWolff y The Mars Volta, y la verdad es que éste último afectó bastante a los arreglos de percusión que se colaron por el disco en su totalidad.

Explicadnos, si es posible, el título del álbum.
Estuvimos meses hablando de cual sería el título perfecto para nuestro primer trabajo de estudio. Todas las ideas que fueron surgiendo nos convencían a los cuatro pero no sabíamos si ponerlo en castellano o inglés ya que nuestros temas son en inglés, por lo que decidimos centrarnos en el diseño de la portada y de ahí sacar un título acertado. No hizo falta, nuestro primer trabajo debía llamarse MATUJA.

¿Cuál es vuestro mejor recuerdo y cuál el peor de un concierto de MATUJA?
La verdad es que cuanto más tocas más buenos momentos recopilas, y en nuestro caso han sido unos cuantos en poco tiempo, aunque probablemente en julio del año pasado, cuando participamos en el festival Operación Bikini en la Siroco, nuestra casa, tras haber presenciado los conciertos de cuatro artistazos de folk y rock, digamos «más suave», nos subimos a cerrar el evento con más caña de lo normal, los cuatro salimos diciendo «pero qué mingas ha pasado ahí!?». Parecíamos un grupo de crossover thrash tocando rock setentero y el público, que en un 90% no había oído de nosotros en su vida, nos dijo lo que les había molado la energía del concierto. Hasta el día de hoy, ha sido probablemente el bolo más salvaje que hemos dado.

Describid vuestro local de ensayo en menos de 10 palabras.
Seguramente con dos vamos que lo tiramos : Caos acogedor.

¿Cuál será el siguiente paso de MATUJA?
Preparar una gira fuera de la capital, nos interesa empezar a darnos en conocer por ciudades donde pueda funcionar nuestra música y ganarnos un público ahí. Durante el verano comenzaremos a planificar fechas mientras terminamos de componer unos cuantos temas nuevos que son «muy nosotros» y esperamos que convenzan tanto a nuevos oyentes como a los Ukka Chakas de siempre (os queremos).

¿Consideráis que en vuestra ciudad existe una escena musical? Y si es así, ¿en qué estado de salud se encuentra?
Madrid tiene una potente y heterogénea escena emergente desde hace años, pero en la actualidad es más fuerte que nunca (desde La Movida, al menos). Hay varios grupos levantados por músicos de conservatorio, residentes en pubs y salas de forma casi semanal que mueven un montón de gente que quiere escuchar buena música en directo y no puede esperar al fin de semana. Lo mejor es que hay muy buen rollo entre los grupos y el apoyo entre bandas es algo necesario aquí y en todo el país. No olvidemos la clase de país en que vivimos en cuanto a apoyo a la cultura se refiere… Si no nos unimos nosotros estamos perdidos.

¿Qué banda de vuestra ciudad nos recomendaríais escuchar?
Esta pregunta tiene una respuesta indudable: Boss and Over. Amigos, vecinos, y probablemente los mejores músicos que conocemos. Sin su música y sin su apoyo constante, Matuja seguiría siendo un grupo de colegas que jammean los jueves por la tarde y nada más.

Pinchadnos un chambergazo
Ya que The Mars Volta nos mola tanto, el tema que poníamos en el coche una y otra vez de camino al estudio:

Por Parca